Sobre la revista

El porqué de nuestra revista

La complejidad del mundo actual, expresada en una producción de conocimiento, exponencialmente inabarcable para el ser humano y las crecientes exigencias de la vida cotidiana, demandan respuestas pertinentes a las necesidades materiales y espirituales de los diversos colectivos sociales. Desde el siglo XIX hasta la actualidad, los grandes avances alcanzados por la humanidad tienen dos raíces fundamentales que han arraigado en el imaginario colectivo de las sociedades, en esa permanente búsqueda del “progreso” o “desarrollo”: la creación de condiciones dignas de vida material y espiritual y la necesidad de producir conocimiento para la transformación y/o adaptación a las condiciones que imponen la naturaleza, los accidentes geográficos y los errores humanos.

En la última década, la sociedad nicaragüense ha venido avanzando de manera sostenida en mejoras materiales y espirituales, producto de políticas públicas que han tenido un impacto positivo en la vida de las familias y comunidades del país. Los avances en materia de salud, educación, cultura y producción, así como en infraestructura comunicacional y de servicios básicos, demandan la formación de recursos humanos cualificados. La educación superior y sus articulaciones con los diferentes subsistemas educativos, deben tener un papel relevante en la conducción y producción de conocimientos.

Desde los primeros meses del presente año, hemos asistido a un nuevo reto de la humanidad: la lucha contra una pandemia (Coronavirus COVID-19) que ha afectado la vida de todas las personas. Esta nueva realidad, ha evidenciado debilidades y fortalezas en nuestros países que deben ser tomadas en cuenta en los planes de formación e investigación, de manera tal que, se continúe avanzando en las sendas del desarrollo con equidad.

La universalización de la educación y el aprendizaje, es uno de los logros más significativos de los últimos tiempos, materializados gracias al esfuerzo del gobierno, la familia y las diferentes expresiones sociales organizadas. El sostenimiento y profundización de las experiencias educativas, pedagógicas de los diferentes subsistemas que componen la educación nicaragüense, pasan por el incentivo de la investigación, la creatividad y la innovación.

La socialización de los diversos usos de las tecnologías, la construcción de aprendizajes sobre diversos procesos y contenidos, sociales, culturales, desde el contexto educativo nacional e internacional, demanda una mayor implicación de los centros generadores de conocimiento del país. La creación de un espacio de divulgación (revista científica de educación) donde converjan saberes complementarios, desde las universidades del país, representa una contribución importante en la transferencia de información científica educativa, incidiendo de manera sustantiva en la promoción del intercambio y la colaboración para el desarrollo integral.